MIQ es la rehabilitación integral de una casa unifamiliar entre medianeras en el casco histórico de Sarria.
La riqueza original de la casa es más que destacable, predominan los tonos rojizos, tejas y verdes, con suelos hidráulicos, paredes de ladrillo y piedra con techos de volta catalana, al llegar al patio posterior, una naturaleza salvaje te rodea y te descubre el pequeño estudio posterior.
Esta riqueza constructiva, es la fuente de inspiración del proyecto.
Nos alimentamos de esta riqueza original y la adaptamos a las nuevas necesidades.
Potenciando la superposición de estilos, que permite conservar la historia y el espíritu de la vivienda.
El trabajo es un ir y venir entre las nuevas necesidades de la vivienda y la recuperación de la herencia existente.
Algo así como elevar el desgaste del antiguo hogar hasta convertirlo en un activo histórico habitable.
El resultado propone una casa con tres habitaciones, un salón-comedor con cocina y un estudio en la parte trasera del patio posterior.
Se respeta la escalera original, pero se rehace la salida al terrado, ejecutando una cubierta formada por una gran doble vuelta.
De esta forma el proyecto convierte la escalera en un pozo de luz en invierno y una chimenea de ventilación en verano, donde las lamas orientables controlan la incidencia solar.
La habitación principal está dotada de un baño desfragmentado con paredes que no llegan al techo, permitiendo así la ventilación cruzada a través de la escalera y la entrada de luz por ambos extremos de la habitación.