Para los 10.000 m2 de superficie edificada del nuevo edificio ubicado en Cornellà de Llobregat, que consta de 85 viviendas sociales distribuidas en 5 alturas, se han utilizado un total de 8.300 m2 de madera KM0.

El diseño de una matriz de habitaciones comunicantes, que elimina pasillos para garantizar el máximo aprovechamiento en planta, y el uso de la madera en favor de las posibilidades de industrialización del edificio, la mejora de la calidad de la construcción y la notable reducción de los plazos de ejecución y las emisiones de C02, son los ejes de este nuevo edificio de viviendas. La edificación se organiza alrededor de un patio que articula una secuencia de espacios intermedios.

En planta baja, un pórtico filtra la relación entre el espacio público y el patio vecinal.

Los cuatro núcleos de comunicación vertical se sitúan en las cuatro esquinas del patio, de manera que todos los vecinos confluyen y se encuentran en el patio-plaza, conformando un espacio seguro desde la perspectiva de género. Las 85 viviendas se distribuyen en cuatro agrupaciones y un total de 18 viviendas por planta.

Alrededor del núcleo se articulan cuatro o cinco viviendas, de manera que todas las tipologías tienen ventilación cruzada y doble orientación. Las viviendas constan entre cinco o seis módulos de unos 13m2.La cocina abierta e inclusiva se sitúa en la habitación central, actuando como pieza distribuidora que sustituye a los pasillos, a la vez que permite visibilizar el trabajo doméstico y evitar roles de género.